Desde hace una década, la señora Lourdes fue diagnosticada con la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), ocasionada por el consumo excesivo del cigarro; hoy hace un llamado a los jóvenes para que eviten esta adicción y estén libres de este padecimiento.
Tos crónica, disnea (dificultad para respirar) y sofocamiento ante la menor actividad física, hicieron que Lourdes acudiera a los servicios médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Morelos, donde radicaba.
Para ella el diagnóstico fue “doloroso y de mucho susto”, indicó, debido a que el consumo de una cajetilla de cigarros al día –desde los 18 años de edad– ya había marcado la presencia de la EPOC en su organismo.
La EPOC es una enfermedad crónica degenerativa, que se produce por la inhalación de humos, como tabaco, de leña o productos que generen combustión, por lo que se considera que es una enfermedad prevenible. Detalló que se trata de una obstrucción persistente de las vías respiratorias y puede aparecer en forma de dos trastornos diferentes: el enfisema y la bronquitis crónica.
Aún con el diagnóstico, Lourdes continuó con el consumo de cigarro, “hasta que toqué fondo, al ver sufrir a mi familia”; razón que la motivó a cambiar su domicilio al puerto de Acapulco, donde el clima cálido le permitió mayor control de su respiración.
Con su nueva adscripción, en la Unidad de Medicina Familiar No. 29 con Unidad Médica de Atención Ambulatoria (UMF/UMAA), fue atendida por especialistas, entre ellos, la médica neumóloga Janet Gutiérrez Segura, a quien le acredita gran parte de la estabilización y control de su enfermedad.
“Gracias a la doctora Gutiérrez, mi familia y la gente que me quiere, salí adelante, ya no he tenido otras exacerbaciones; me ha ayudado mucho la sana distancia. Me sentí muy tranquila, porque mi neumóloga del Seguro Social estuvo muy cerca de mí”.
La paciente relata que gracias al buen tratamiento médico recibido en el IMSS y el apoyo familiar, pudo mantenerse estable. “Le debo mucho al Seguro Social, yo estoy encantada con esta clínica y agradezco que tiene tantas personas de calidad, porque los dos neumólogos que me atendieron aquí son de 10”, expresó.
Ahora con 70 años de edad, la señora Lourdes explicó que también modificó sus hábitos de vida, con buena alimentación, ejercicio y seguir su tratamiento médico al pie de la letra; además de ser muy cautelosa en las medidas sanitarias para evitar otras enfermedades como el COVID-19.
Con lágrimas en los ojos, la señora Lulú relató el fallecimiento de una persona cercana a ella que padeció también la enfermedad, por eso pido a los jóvenes que reflexionen y eviten fumar.
En tanto, la médica neumóloga Gutiérrez Segura informó que además del humo del tabaco, la EPOC puede desarrollarse por la inhalación constante y prolongada de humo de leña o productos que generen combustión, como gases.
La especialista destacó que, aunque la enfermedad sólo es controlable, el Seguro Social ofrece tratamiento completo para los pacientes, y reiteró la necesidad de hacer conciencia en la población sobre los riesgos que generan el tabaquismo y la exposición al humo.
Déjanos tu comentario