Médula| ¿Voluntad ciudadana?

Por Jesús Lépez Ochoa

No sé qué es peor, que a la sobrina de la alcaldesa Adela Román la bajen de las listas de plurinominales de Morena por no haber cumplido con separarse de su cargo como presidenta del DIF, o que diga que fue la voluntad ciudadana la que la puso en primer lugar de las pluris. ¡Hazme favor!

Sin un proceso de competencia en el que los ciudadanos expresaran su preferencia hacia nadie, ¿Cuál voluntad ciudadana puede haber? Es completamente inexistente. Una decisión de partido, de imposición incluso podría pensarse por tratarse de la sobrina de la alcaldesa de Acapulco.


Yo no tengo ninguna duda en que Adriana Román es una mujer muy capaz y con todas las aptitudes necesarias para ocupar cualquier cargo, pero lamentablemente busca confundir a la opinión pública ya que las listas de plurinominales se definen en la mesa de negociación como se definieron muchísimas otras candidaturas en este proceso electoral.

Pongamos ejemplos de aquellos políticos que como ella representan un relevo generacional. El hijo del ex gobernador René Juárez Cisneros que va en la lista de regidores del PRI, tampoco podría hablar de la voluntad ciudadana por el momento.

Incluso yo me niego a decir que en cargos plurinominales se exprese la voluntad ciudadana. El ciudadano vota por el candidato propietario ya sea a gobernador, diputado o a presidente municipal, o incluso por la marca del partido que los postula y ellos entran como que de refilón, como premio al partido que logra más votos y se van asignando conforme se van restando los votos que van sobrando.

De esos políticos que representan un relevo generacional ¿quién sí podrá hablar de voluntad ciudadana? Pues Ricardo Astudillo Calvo, él podría ir en los primeros lugares de la lista de plurinominales al Congreso de Guerrero o incluso a una diputación federal por la misma vía por ser hijo del actual gobernador, sin embargo eligió competir por el distrito 7 de Acapulco, recorrerlo, hacer campaña escuchando y convenciendo a la gente, y el 6 de junio va a competir por ocupar el cargo.

Si él gana, Ricardo Astudillo sí podrá hablar y con toda verdad de que la voluntad ciudadana lo puso en una curul en el Congreso de Guerrero porque no solo tendrá legitimidad legal para ocupar el cargo, sino también –Aquí la diferencia— la legitimidad política para representar a los ciudadanos en la máxima tribuna del estado.

Hay que decir las cosas como son, y no tratar de confundir al electorado como quiso hacerlo Adriana Román.

EL TON Y EL SON

Héctor Vicario Castrejón es un personaje muy experimentado en la política, sobre todo en la parlamentaria, y sin rodeos señala la principal debilidad de la actual bancada de Morena en el Congreso de Guerrero.

Ésta es, dijo, que los diputados de ese partido que ha mantenido el control del Congreso a lo largo de la legislatura por concluir llegaron con un profundo desconocimiento de lo que es el Congreso de Guerrero.

Llegaron pensando que se trataba de un gobierno a aparte y no que entre el Poder Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial “forman el gobierno de Guerrero”, una lección básica cortesía del avezado parlamentario que espera ganar la diputación por el distrito 23 local el próximo 6 de junio para ayudar a corregir muchos de los errores que tuvieron que ver con la inexperiencia y la arrogancia de quienes han presidido el Congreso en la actual Legislatura.

De entrada Vicario se pronunció por pedir una aclaración del manejo financiero tan cuestionado por un supuesto ahorro que no fue ahorro de entre 36 y 50 millones de pesos.

Revolcadero

LÁSTIMA.- Más del 80 por ciento de los más de 500 servidores públicos que solicitaron licencia para ir en busca de candidaturas ya se regresaron a sus cargos tras haber fracasado en su intento de brincarle a otro más importante.

INVASIONES.- No todo es malo en la bancada de Morena, la diputada Mariana García Guillén es de los más rescatable por su productividad y atención a los problemas como los incendios forestales y la invasión del Parque Nacional El Veladero. Lo que sí es malo es que su partido postule para la alcaldía de Acapulco a una candidata cuyo capital político proviene precisamente de las invasiones de predios.

DORMIDOS.- Si la elección en Acapulco fuera en el Facebook la ganaría Ramiro Solorio. El brother, como se hace llamar, ganar todos los sondeos que hay que decirlo, no tienen un rigor estadístico pero si generan percepción en la comunicación de redes donde su equipo está muy despierto, mientras los de otros candidatos están dormidos en sus laureles. Claro el 6 de junio de los me gusta y me encanta se expresan en las urnas porque es ahí donde cuentan.

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