El dos veces ex secretario de prensa y propaganda del comité Estatal del PRI en Guerrero, Miguel Ángel Hernández Albarrán, hizo un llamado a los actores políticos del tricolor a serenarse, incluido al ex candidato a la gubernatura Mario Moreno Arcos para no buscan culpables por la derrota electoral del pasado seis de junio.
Hernández Albarrán, quien ha ocupado diversos cargos públicos en distintos gobiernos, desde José Francisco Ruiz Massieu hasta René Juárez Cisneros, estimó que muchos de los que reclaman traiciones de la elección pasada, tampoco gozan de cabal salud y política, porque en su momento también respaldaron a una propuesta distinta a la de su partido.
El también columnista político, estimó que ante las venganzas y las revanchas que se buscan en el PRI, no se debe dejar crecer a los enanos y consideró que se debe ajustar a la militancia a sus documentos básicos y seguir en el esquema de alianzas políticas de cara a los próximos años.
Pidió que se hagan a un lado de los protagonismos, terminar las herencias políticas en el PRI, porque eso ha dado como resultado muchos descalabros electorales porque la militancia está cansada de que los “ismos” sean los más beneficiados en cada elección.
Hernández Albarrán, confía que en Guerrero se dé una transición política pacífica y que no se vea alterada por aquellos que van a utilizar las deslealtades, las traiciones y la revancha política, porque se sienten ofendidos, maltratados o solo por quedar bien por los que vienen.
Resaltó que actualmente hay “funcionarios y ex funcionarios, así como a militantes del PRI”, de los cuales muchos ya tienen la intención y otros ya le están llevando sus currículums a los Salgado, Félix y Evelyn” para tratar de formar parte de la administración venidera. “Funcionarios en funciones, algunos que se dicen amigos del actual gobernador”, dijo.
Pidió que, en lugar de buscar culpables, por el sentimiento de la derrota, Mario Moreno tiene que generar una retrospectiva interna para analizar la historia reciente y la pasada, abonar al respeto a los guerrerenses y recordar la máxima del ex gobernador guerrerense, José Francisco Ruiz Massieu cuando dijo “o cambiamos o nos cambian”.
Aseguró que la campaña pasada de Mario Moreno fue muy buena porque repuntó muchos de los puntos con los que arrancó abajo del partido y los aspirantes de Morena y como prueba de ello, quedó el resultado de la elección que no fue un triunfo arrollador como dijeron los Salgado.
“A él le corresponde esperar y no ser utilizado, debe de reconocer su avance y logros políticos y no tirar a la basura todo por dejarse llenar el hígado del resentimiento entre grupos de poder», abundó.
Consideró que quienes le calientan la cabeza a Moreno Arcos para poder en un momento dado tratar de buscar culpables dentro o fuera del PRI, son los que en un momento dado quisieran que el PRI fuera unos despojos, cuando tiene una gran responsabilidad de ser él quién demuestre que no estaban equivocados los miles de guerrerenses que lo respaldaron en la elección. “Debe garantizar que se haga valer la gobernanza para los guerrerenses”, dijo.
Recordó que AMLO no ha tratado muy bien al gobierno de Guerrero ni a su gobernador, a quien no le perdona el reclamo de su visita a la entidad cuando el entonces delegado federal Pablo Amilcar Sandoval le orquestó la rechifla en la Montaña y Astudillo le espetó que si no servía se retiraba.
Finalmente, dijo que el balance final de la elección, deja con fuerza al PRI para reorganizarse y ser el equilibrio en la gobernanza y gobernabilidad que requiere Guerrero como continuidad ya establecida que permitió la administración de Héctor Astudillo Flores.
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