Por Jesús Lépez Ochoa
La visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Acapulco da claridad al proceso de entrega de apoyos económicos a las familias damnificadas, al tiempo que manda un mensaje de unidad de parte de los gobiernos federal, estatal y municipal.
Ambas cosas eran muy necesarias para quitar ruido a la reconstrucción de Acapulco que se estará desarrollando en un clima netamente electoral, no solo por parte del partido en el gobierno, si no de la misma oposición.
Si algo necesitan los ciudadanos afectados por el huracán es la certeza de que tienen el respaldo de federación, estado y municipio por encima de cualquier interés político.
Y quedó claro que no había más motivo que el político para excluir a la alcaldesa Abelina López Rodríguez por su cercanía con el ex canciller Marcelo Ebrard Casaubón, y que al recular este su postura y someterse a la voluntad presidencial ha cambiado el panorama para la presidenta municipal que hoy ocupó un lugar en la conferencia mañanera.
A Abelina no se le puede reprochar ausencia o desatención como la que octubre de 1997 tuvo un alcalde priísta y que le costó que el entonces presidente Ernesto Zedillo le exigiera su renuncia.
Ella por el contrario, el pasado 24 de octubre, en las primeras horas, alistó al Comité de Protección Civil Municipal con integrantes civiles y militares de los tres órdenes de Gobierno.
Al conocer la proximidad del huracán Otis, realizó acciones informativas en medios de Comunicación y de manera directa para alertar a la población del inminente riesgo que se advertía por la proximidad de este meteoro de poderosas dimensiones.
El mismo 24 de octubre, en Palacio de Gobierno, López Rodríguez, instaló el Centro de Mando para continuar con las acciones de Protección Civil y dar seguimiento a los efectos y urgencias a la población por los efectos de Otis.
La Presidenta Municipal, de manera constante y con el Comité de Protección Civil Municipal, realizó reiteradamente avisos y alertamientos de manera virtual en medios de Comunicación y de manera personal, acudiendo personalmente a zonas caracterizadas para infomar a familias que habitan en zonas de alta vulnerabilidad.
La última comunicación con la ciudadanía que sostuvo la alcaldesa, Abelina López Rodríguez, fue a las 22:30 horas del 24 de octubre, cuando la electricidad y la comunicación electrónica comenzó a fallar y a dejar a Acapulco incomunicado y a oscuras.
Pero a las 4 de la madrugada del 25 de octubre, a la postre del devastador paso de Otis, la Presidenta Abelina López Rodríguez, pudo salir del devastado Centro de Mando en el Ayuntamiento y sin energía eléctrica en todo Acapulco y sin cobertura de Internet, procedió personalmente a inspeccionar e iniciar la ayuda a la población por los daños humanos y materiales causados por el huracán Otis en Acapulco.
Otro tema importante, es el de los apoyos económicos anunciados el 1 de noviembre por el presidente como si fueran a entregarse de manera inmediata esa misma semana.
Hoy ya fijó plazos más creíbles a partir de finales de este mes a diciembre, lo cual también genera confianza.
El tema pendiente es el del pago de impuestos que ha dicho que no se pagarán, en virtud de que en un decreto emitido dos días previos a su anterior anuncio, se establece que sí deberán ser pagados a lo largo del primer trimestre del año, lo que generaría una bola de nieve en las lastimadas finanzas de los contribuyentes acapulqueños que perdieron patrimonio e ingresos por el impacto del huracán.
Muchos inclusive ya declararon y pagaron el IVA de octubre para evitar tener que pagar dos meses juntos a partir del próximo año estando en una precaria situación.
Sería bueno que también se de claridad y tranquilidad a los contribuyentes sobre este asunto.
Déjanos tu comentario