En la parte alta de la colonia Ricardo Morlet Sutter, que a su vez es la parte alta de la Nueva Era, en la zona Poniente, Spiderman no pudo resistir la presión de niñas y niñas que le pedían, exigían casi, quitarse la máscara. Lo hizo, y un ¡oooh!, se extendió como un suspiro colectivo y dejó suspendidos los alientos por unos segundos. Tras el aditamento asomó el rostro un joven, de 15 o 16 años, quizá 14, ciertamente muy parecido al Peter Parker de las películas.
Era viernes por la noche. En la calle de terracería, niñas y niños convivían con la diputada Yoloczin Domínguez Serna, que los visitó dentro de la Caravana de la Felicidad que la legisladora organizó por el Día de la Niñez, según explicó, para “tratar de llevar un momento de alegría, de felicidad, de armonía, de diversión principalmente, a todas las niñas y niños de Acapulco”.
-Hay que bailar -exclamó una niña, apenas pasado el asombro de haber conocido a Spiderman en persona.
Y, bajo la luz de los focos, se armó el guateque. Durante unos 40 minutos, niñas y niños tomaron el micrófono, para cantar sus canciones preferidas, algunas, clásicos infantiles, pero otras de modas más recientes. Bailaron, hicieron juegos, sin importar el polvo de la calle. La diputada, ataviada según la película de Mario Bros, se dio su tiempo su tiempo para jugar, para bromear, para cantar y bailar y hacerles participar.
“Nos estamos dando ese espacio -dijo en una posterior entrevista-, yo en lo personal, con ellos para convivir, no solamente la típica visita de dar los regalos y hasta ahí, sino de tratar de convivir, de amenizar, de que los niños se sientan contentos, de que aunque sea unos minutos, podamos divertirnos”.
Y era cierto. Si algo caracterizó a esta caravana, es que fue la participación, más que los regalos, lo que prevaleció. “Nos hemos llevado una sorpresa muy bonita porque la verdad, ha habido una respuesta bien padre por parte de los niños, principalmente y también de parte las mamis y los papis que nos acompañan a los eventos, y que se dan cuenta de que no es la típica visita, regular de políticos, sino que es una visita donde prácticamente nos estamos tratando de ganar a sus hijos haciéndolos reír y llevándoles la diversión”, señaló.
La caravana inició desde el viernes, para abarcar todo el distrito 4 federal hasta el sábado, y el domingo y lunes, el 2 federal, abarcando la zona rural, las colonias, los barrios, unos 30 por lo menos. La Caravana de la Felicidad arrancó en petaquillas el viernes, y abarcó ese día colonias como la Laja, la Bocamar, Marroquín; el sábado tocó a la colonia Galeana, Alta Icacos, 20 de Noviembre, Lázaro Cárdenas, Jardín Azteca, Palmas y Mangos, el Pedregoso, San Isidro y la parte alta de la Nueva Era.
El domingo correspondió a los bienes comunales de Cacahuatepec, en el poblado de este mismo nombre, atravesando el río Papagayo, y en Amatillo; a Laguna del Quemado, Rinconada, y Tres Palos; el lunes, tocó a los barrios históricos, a la colonia Del Valle, Renacimiento, Arroyo Seco, Zapata, Paso Texca y la Providencia. Inclusive los cuatro días fueron insuficientes para recorrer todas las colonias, por lo que el próximo fin de semana se tiene previsto realizar otras visitas.
En cada una, la tónica fue la convivencia. Domínguez Serna actuó como animadora, en una faceta poco usual en los políticos. Acompañada del personaje de Spiderman, cantó con los niños y niñas, les dio el micrófono para oírlos cantar, y estimuló su participación, que fue bastante, pues no importaba si tenían 2 o 5 o 10 o 12 años, las pequeñitas y los pequeñitos hicieron suyo el espacio.
Lo importante, dijo la diputada en Amatillo, uno de los lugares donde mayor número de infantes se congregó, “es, por lo menos, sacarles una sonrisa”.
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